domingo, 28 de noviembre de 2010

Una idea que se nos ha ocurrido a muchos...

¿Qué escándalo la comida que se tira...? Estas navidades seguro que se siguen batiendo records...la cosa es aún peor en paises en desarrollo. Este video lo mostró Ana María Llopis en el Forum de Innovación en La Rioja como fruto de un concurso de videoblogs de ideas que ellos organizan -ideas4all-.

jueves, 25 de noviembre de 2010

Innovando en la práctica

Carlos nos ha invitado hoy en el Taller de Mayores del Foro de Innovación en la Roja a movilizarnos a todos los asistentes. Nos hemos dividido en dos grupos y hemos hablado de aficiones y saberes. A partir de este compartir los mayores nos han brindado una serie de focos de interés desde los cuáles podrían hacerse actividades -videos, fotografías, blogs,...-. Algunas de las ideas aportadas:

-Enseñar recetas tradicionales a los jóvenes
-Recopilar juegos con los que nos divertiamos
-Planificar juntos una ruta del Camino de Santiago y volcar nuestra experiencia en un blog

El tiempo se nos pasó volando -se notó la energía cuando el proyecto engancha-...
Carlos Bezos tiene la experiencia de haber puesto en práctica esta dinámica en SeniorLab

miércoles, 24 de noviembre de 2010

Innovación social "para, con y en" la Tercera Edad


1) Parece que vamos hacia una nueva sociedad de mayores, con más edad y más experiencia…

En España, hace tan sólo unas décadas, el número de personas mayores era limitado y su proporción, dentro del conjunto de la población, equilibrada. Sus problemas se solventaban fundamentalmente en la familia. En las últimas décadas, el panorama demográfico y su perfil ha cambiado: se ha producido un rápido envejecimiento de la población, propiciado por un aumento continuado de la esperanza de vida y la reducida tasa de natalidad. El resultado es que el número de personas mayores crece y su proporción, con respecto a las personas en edad reproductiva y laboral, crece también. Se calcula que en el estado español para el año 2020, su número superará los ocho millones, y para el 2050 se habrá duplicado esa cifra: 16,3 millones (31% de la población). La proyección de la ONU situaría a España, tras Japón, como uno de los países del mundo con la población más envejecida. ¿No será necesario un esfuerzo de la sociedad en su conjunto cuando intuimos –por no decir que sabemos perfectamente- que las soluciones actuales a la tercera edad son insatisfactorias?

El envejecimiento de la población y, en general, la modificación de nuestra pirámide demográfica –a nivel europeo-, tiene que llevarnos a todas las instituciones a revisar y replantear las políticas a llevar a cabo en materia de empleo, de seguridad social, de bienestar social, de educación, de atención a la salud o de economía, por citar tan sólo algunas. ¿No estamos todavía sesgados hacia la eficiencia –cómo gastamos menos- en lugar de hacia la eficacia –cómo lo hacemos mejor o hacemos cosas nuevas?

2) Las personas mayores no siempre se encuentran “a gusto” en esa sociedad

Por citar algunos aspectos. El aumento de la esperanza de vida agudiza el problema del habitat. En general las personas mayores precisan de unas condiciones de vida manifiestamente mejorables. Según la última encuesta del IMSERSO un 30% de los ancianos no tiene cuarto de baño completo en su casa, sólo dos de cada 10 soportan los veranos con aire acondicionado y la mayoría, eso sí, aguanta los inviernos con calefacción, un 64%, el doble que hace 17 años. Hay que pensar en el habitat de los mayores ¿se tiene esto en cuenta en las Facultades de Arquitectura? ¿en quienes se piensa cuando hablamos de las casas del futuro? ¿quiénes estarán en ellas?

Pero el habitat no es suficiente. Se precisa el calor humano. Como ya indicábamo en otro post -No sin ellos/as- el 84% de las personas mayores vive acompañado. Del 16% restante, la mayoría se centra en mujeres rurales (ancianidad a solas). Las residencias son futuro imperfecto en el verbo de los ancianos, porque nueve de cada 10 (el 87,3%) prefiere vivir en su casa aunque sea solo. Aunque existen situaciones preocupantes. En el Área de Acción Social del Ayuntamiento de Bilbao existía desde hace tiempo la inquietud por conocer el alcance y la situación de la población que no recibe Servicio de Ayuda a Domicilio, así como las causas que originan que estas personas no estén dentro de la red de usuarios de los Servicios Sociales. Los técnicos de esta área municipal intuían que en el colectivo de personas mayores de 85 años concurrían dos situaciones que les mantenían fuera del sistema público de Servicios Sociales. Una, el desconocimiento de los derechos que como ciudadanos de Bilbao tienen respecto a las prestaciones en materia social; y dos, la imposibilidad de gestionar por ellos mismos la tramitación del servicio que deseaban. Su hallazgo -gracias a un magnífico estudio de las cooperativa Servicios Sociales Integrados- fue que un 30% de las personas mayores de 85 años necesitaban ayuda (aunque no la pidieran...) ¿están pensando los servicios sociales municipales en estos ciudadanos y en cómo llegar a ellos/as?

3) La sociedad precisa adaptarse al cambio y a las nuevas necesidades.

A pesar de esto este nuevo episodio social que lentamente va creciendo –como las grandes olas en el mar- no pasa desapercibido para el sector privado lucrativo. Las empresas dirigen cada vez más sus esfuerzos de innovación a buscar productos orientados hacia la tercera edad. Un exponente de esta apuesta es el caso de la Casa Kinect: un espacio abierto por Microsoft en el centro de Madrid para conocer la nueva forma de jugar sin mandos con Xbox 360. Lidia Pitzalis, directora de relaciones públicas de Microsoft, destacó que los mayores están actualmente marginados en la sociedad de la información y confió en que la situación cambie con la facilidad de uso de Kinect: "estamos para demostrar que cuando cambian las reglas y el ser humano se sitúa en el centro, se rompen las barreras", afirmó. Los abuelos jugarán con sus nietos si la tecnología es fácil –y probablemente serán propicios a comprar consolas- e incluso a utilizarlas –para prácticar Tai Chi… (Your Shape: Fitness Evolved). Vean también la estrategia publicitaria de la casa Mercedes y su último anuncio en el que dedica los lunes a los abuelos-canguro o el reciente spot televisivo de Nintendo en el que un abuelo y su nieto juega juntos con el "veterano" Mario Bros. También existen empresas, por ejemplo, que están diversificando sus actividades desde su núcleo de negocio -capacidad para conseguir licitaciones a nivel público- y encuentran en los servicios sociales una nueva oferta de servicio para las instituciones públicas -en el Forum de la Rioja tuve el gusto de escuchar el caso de Ociosport, que comenzó dando clases de natacíón para después gestionar instalaciones deportivas mientras hoy día tiene centros de día y residencias-.

4) Las instituciones públicas tendrán que orientar sus programas y dedicar más recursos y mejor…la autonomía personal es un derecho.

En relación a la oferta pública el desajuste entre oferta y demanda es notorio. Ya lo hemos dicho, algunos ancianos no conocen los servicios sociales y otros no los usan mayoritariamente. La encuesta del IMSERSO afirmaba que los más famosos -centros y hogares sociales- eran utilizadas sus prestaciones por un 35%. Lo siguiente más consumido son las vacaciones del Imserso, de las que tira un 15% de los mayores. La ayuda a domicilio, la teleasistencia, los centros de día o las residencias son dispositivos que nunca superan el 7% de uso por parte de las personas mayores. Por tanto resulta prioritario innovar a nivel de servicios públicos orientados a la tercera edad.

5) ¿Deberían estar tranquilas las personas mayores porque las empresas –y las instancias públicas- van a saber responder a sus necesidades?

Ya hemos visto que los cambios demográficos y las necesidades tecnológicas son un bocado apetitoso para las organizaciones empresariales –aumento de ventas y beneficios- en complicidad con el sector público –generación de empleo-. "Si las personas mayores utilizasen internet con la misma ratio que la gente joven, se generarían 15.000 millones de euros anuales" afirmaba el dueño de Tecnointegra, una empresa que colabora con Microsoft en el tema de las videoconsolas- y añadió "que surgirían más de 400.000 empleos en un año”. La tercera edad es un segmento de la población que genera y generará empleos a nivel tecnológico y asistencial -empleos blancos- lo que también afectará al tercer sector. Pero una postura pasiva de los mayores ante estos cambios puede ser peligrosa…y los datos hasta el momento son preocupantes. Según datos del proyecto Share -estos datos los tomo del blog de Carlos Bezos-, en España existe muy poca disposición a trabajar después de los 65% años. Solamente el 8,4% de los mayores de 65 años se encuentra en activo; el 66% de los cuales son autónomos: es decir, están forzados a continuar en activo en su mayoría. España se sitúa así a la cola de los países en los que se valora más la actividad en la vejez, al contrario que Suecia, donde un 71% de la población desdea permanecer activa. En un lugar intermedio permanece Alemania, donde un 51% opta por una vejez activa. En ese país, el 30% de los trabajadores se imagina continuar trabajando en su ámbito y el 60% puede imaginar dedicarse profesionalmente a otro área. Si asumiésemos que en España las cifras de personas mayores dispuestas a estar activas fuese aumentando ¿cómo responderíamos a este reto? ¿vamos a desaprovechar el potencial y el talento de millones de personas?. A nivel de ocio el 87% de los mayores se apunta al mando a distancia como actividad principal. El 63% tira de la radio y el 60% acude alguna vez a la semana a actividades relacionadas con la iglesia. La lectura diaria es un escape para el 17% de los mayores Posiblemente esta pasividad interesa a muchos pero ¿es lo más beneficioso para los mayores?

6) Hay que arriesgarse, ser activos y participar también en la innovación

Innovar es incompatible con la pasividad. Implica asumir nuevos riesgos personales… reinventarse desde lo que nos gusta Innovar no sólo inventar nuevos productos altamente tecnológicos para venderlos…Innovar es una actitud que supone…arriesgarse y buscar alternativas para resolver problemas, romper barreras y crear espacios para compartir (ver el caso del Telecentro de Cabezón de la Sal y el blog creado por mayores: el huerto de jovita) , estar abiertos a experimentar nuevas sensaciones (el caso de Ruth Flowers -Mamy Rock- resulta sorprendente...), aprender nuevas herramientas y nuevas formas de autonomía, abrirse, en definitiva a nuevas posibilidades personales y colectivas que nos invitan a descubrir, redescubrir y compartir… Una experiencia estraordinaria es la de las abuelas cuentacuentos en Argentina cuya idea es reproducir ese momento de belleza e intimidad que se da naturalmente entre los abuelos y los nietos al leer juntos y que ellas con su empuje lo han trasladado a escuelas, hospitales, cárceles,....

El 2012 será el "Año Europeo del Envejecimiento Activo y la Solidaridad Intergeneracional". Hay que romper barreras: relacionarse con otros y con las nuevas generaciones. Arriesgarse para reconstruir los vínculos sociales. Hay que vencer el aislamiento. Para eso hay que ir a lugares dónde encontrarse a alguien. También hay que conectar con las nuevas generaciones.

Una conexión por afecto ha sido cuidar a los nietos y la sociedad ha de reconocer las nuevas aportaciones –la capacidad de adaptación de los mayores- a los cambios en la sociedad. De jubilación nada de nada…existe una labor social de los mayores en apoyo a la familia, un nuevo “trabajo”: cuidar nietos. El 50% de los abuelos se ocupa de los chavales casi diariamente, dos puntos porcentuales más que las abuelas. Sin embargo, la frecuencia se la llevan ellas, porque la media en las mujeres es de 6,2 horas de cuidado al día y en los hombres de 5,3. Efectivamentte los abuelos han facilitado la incorporación de la mujer al trabajo al cuidar de los nietos.

7) La innovación es posible en la tercera edad: aprendiendo, participando en lo nuevo o redescubriendo actividades que aportan valor social.

Alrededor de 35.000 hombres y mujeres de entre 55 y 80 años acuden diariamente a las Universidades de la Experiencia o Aulas de mayores. En la mayoría de los casos, el título que se obtiene tras finalizar los estudios no posee ningún valor académico o laboral, ya que el objetivo de estos cursos es bien distinto: persiguen promover la reflexión y la curiosidad por el saber, al tiempo que promueven relaciones intergeneracionales entre alumnos jóvenes y maduros. El nivel académico de quienes desean matricularse en las Universidades de la Experiencia o Aulas de mayores carece de importancia, y así el perfil de los alumnos es muy heterogéneo: amas de casa y trabajadores de la construcción comparten pupitre con doctores o maestros de escuela. Según datos universitarios, el 8% alumnos de estas carreras no cuenta con ningún tipo de formación y el 5% ha cursado una licenciatura o un doctorado. La gran ventaja de estas aulas es que la experiencia vital de los asistentes, su sentido práctico y participativo posibilitan el intercambio de inquietudes, conocimientos no escritos o habilidades forjadas a lo largo de toda una vida.

En estos nuevos lugares de encuentro se puede redescubrir “lo valioso” en actividades cotidianas y hobbys que pueden cobrar un sentido innovador desde sus nuevos significados (la sensibilización respecto al medioambiente y/o lo saludable) como los huertos urbanos y ecológicos. También otro tipo de iniciativas intergeneracionales -compartir pisos universitarios y ancianos son cada vez más abundantes.
8) Las TIC juegan a favor de los mayores.

En el Foro de Innovación de la Rioja lo apreciaban muchos expertos: los mayores están utilizando cada vez más las nuevas tecnologías. Y es que las personas mayores sin conocimientos tecnológicos previos son capaces de aprender tecnología. La experiencia del Taller SeniorLab en el Living Lab de Cornellá es fantástica. En sus cuatro años de recorrido se ha observado que los mayores pueden pasar rápidamente de un estadio pasivo a uno activo: el 71% mejora en autoestima, el 87% cambia de hábitos, el 50% mejora en sus relaciones sociales y un 42% aprende a utilizar las TIC. Además, los seniors han desarrollado tecnología de vanguardia (ConnectAlzheimer; 55+; Red del Cuidado) y han participado en el testeo entornos de co-desarrollo con empresas tecnológicas productos nicho orientados a mayores. Maria Carcereny, participante en Seniorlab 2008S afirmaba “Seniorlab es un grupo de gente mayor que se encuentra para desarrollar ideas. ¿Qué ideas? Por ejemplo, la memoria. Nosotros somos una generación que hemos visto muchos cambios. La sociedad ha cambiado tanto que somos una generación que ha perdido el tren, que hemos pasado del “sí, padre” al “sí, hijo”. Queremos transmitir nuestra memoria como experiencia, e incluso más, como identidad. A nuestros padres les sirvieron los esquemas de sus padres. Pero nuestra generación ha tenido que inventar el camino” A nivel internacional es muy interesante la experiencia desarrollada por Business Innovation Factory (ver presentación final) y por Elder Power un site pensado para apoyar la autonomía personal de los mayores.

9) Concluyendo: innovación tecnológica y social

Las empresas innovan para vender (los mayores aprenden a hacer de buenos "canguros" y los nietos le piden el juguete a los Reyes Magos). Las organizaciones sociales –el tercer sector- deberíamos crear los espacios donde los mayores innoven con sentido social: enseñar a niños y reducir el fracaso escolar, a transmitir su experiencia en la educación de sus hijos, a practicar la no violencia ni de genéro ni de ningún tipo, a ser ciudadanos informados e informantes…las TIC ayudan, el tercer sector se está implicando en la reducción de la brecha digital de los mayores pero la innovación social no puede limitarse a lo tecnológico. La innovación social puede desarrollarse también sin artefactos aunque requiere voluntad y motivación. Las personas mayores tienen que dar “un salto”… para ocupar nuevos espacios, para aprovechar las oportunidades que les brinda este tiempo, para dejar de ser consumidores pasivos y actuar como ciudadanos activos y críticos convirtiéndonos en auténticos protagonistas de la innovación social y tecnológica.

viernes, 19 de noviembre de 2010

Un Techo para Chile: replicabilidad e incidencia social

Esta ONG -creada en 1997 por el sacerdote jesuita Felipe Berrios con un grupo de jóvenes universitarios- se planteó combatir los problemas de pobreza tomando como punto de partida la construcción de viviendas de emergencia -conocidas en Chile como "mediaguas"- que proporcionaran a las familias un techo digno bajo el que vivir, para luego seguir actuando sobre otros aspectos de la exclusión social. Desde sus inicios, el proyecto tuvo como base el trabajo voluntario de estudiantes universitarios apoyados por jóvenes profesionales y empresas del sector privado, que aportan financiación.
Un Techo Para Chile -premiada por la CEPAL como experiencia de innovación social- ha sido tomada en cuenta por las autoridades de su país hasta el punto de convertirse en una referencia de la política pública, pero además su experiencia ha sido emulada en otros países. En efecto, la ONG trabaja hoy en 18 países de la región bajo el nombre de Un Techo Para Mi País, y además el proyecto está siendo evaluado por el Banco Mundial para detectar el impacto de la entrega de viviendas de emergencia en la calidad de vida de los asentamientos en México, El Salvador y Uruguay.
La constatación de que esta iniciativa es tenida en cuenta por los gobiernos tuvo su punto más destacable a raíz del terremoto que asoló Chile en febrero de este año. El entonces recién asumido gobierno de Sebastián Piñera asignó a Un Techo Para Chile la responsabilidad de construir la mitad de las 40.000 "mediaguas" que se necesitaban urgentemente en las zonas devastadas para proteger a las familias damnificadas del frío y la lluvia antes de que llegara el invierno austral.Con 30 millones de dólares obtenidos en la colecta pública Teletón, Un Techo Para Chile levantó en tiempo récord 23.000 viviendas de emergencia, explicó a Efe su directora ejecutiva, Javiera Pizarro.
No era la primera vez que esta ONG trabajaba bajo la presión de levantar aldeas tras una catástrofe natural. De hecho, el nacimiento de Un Techo Para Mi País tuvo que ver precisamente con un terremoto: el que devastó El Salvador en 2001, recordó a Efe Francisco Irarrázaval, entonces un joven voluntario y hoy secretario ejecutivo del Programa Barrios y Aldeas, del Ministerio de Vivienda de Chile.
Una de las experiencias más esforzadas que le ha tocado vivir a Un Techo para Mi País tuvo que ver también con otro terremoto, el ocurrido en Haití apenas cinco semanas antes que el de Chile, y en el que murieron más de 200.000 personas. Pese a la falta de apoyo de las autoridades de un país que padece gravísimos problemas sociales y políticos, y donde conseguir madera para una cabaña puede ser incluso peligroso, la organización ha conseguido habilitar 500 viviendas, y para enero de 2011 proyecta construir 2.000 más.
En Chile, en los trece años que lleva funcionando, han levantado más de 50.000 "mediaguas" (incluidas las construidas a raíz del terremoto), ha capacitado a 7.500 pobladores, ha entregado 1.500 créditos a microempresarios, ha abierto 50 bibliotecas y ha convocado a 20.0000 voluntarios.
El quinto terremoto más devastador de la historia echó por tierra el sueño de esta ONG de que en 2010, el año del bicentenario de Chile, ya no hubiera campamentos, pero sus voluntarios y dirigentes están seguros de que lo lograrán dentro de poco tiempo.

miércoles, 10 de noviembre de 2010

Prisión y rehabilitación: ¿una experiencia posible?

No es la primera vez que nos referimos en este blog a la necesidad de replantearse la experiencia carcelaria y afrontarla como un reto para la innovación social (ver Más innovación, más libertad o El córo de la carcel) . La carcél es una “invención social” de la que habitualmente decimos que es un “mal necesario”…en aras de la justicia, se intenta apartar las personas que infringen las normas y castigarlas por el mal cometido…Mejores instalaciones, medidas de seguridad sofisticadas…pero el sistema en sí mismo cambia poco. Hace unos meses tuve noticia (el 2 de octubre cumplió su décimo aniversario) de la labor desarrollada por la Comunidad Loiolaetxea (San Sebastian) una comunidad formada por cuatro jesuitas y ocho laicos(as) que comparten una casa y su vida con otras personas, la mayoría de ellas con experiencia penitenciaria, que buscan caminos nuevos de inclusión social. Además participan junto con otras asociaciones, fundaciones y administraciones públicas del campo de la inclusión social, en la red de intervención social de la ciudad y el territorio histórico de la provincia de Guipúzcoa y en varios grupos de reflexión sobre inmigración y procesos comunidatios. Este lugar de encuentro de diversas generaciones, edades, culturas, religiones y experiencias de vida se convierte en todo una experiencia innovadora –a nivel social- (rehabilitación, inclusión social, encuentro intercultural,…) con planteamientos vitales que nos hacen repensar ciertos problemas sociales –como la rehabilitación penitenciaria- que nos interesa pensar que están resuelto. En un documento publicado por esta comunidad en el Suplemento del Cuaderno núm. 167 de Cristianisme i Justicia- (n.203) - Abril, 2010 se plantean varias preguntas clave a la hora de “reinventar” la situación que viven 76.000 personas privadas de libertad en todo el estado español que ahora transcribimos desde su planteamiento innovador:

¿Cómo solucionar los daños que nos causamos unas personas a otras? La respuesta que hoy mayoritariamente damos es “pagando lo que hacemos en la cárcel”, pero afortunadamente hay otras muchas. ¿Es siempre un juicio la mejor manera o se puede ir impulsando la mediación reparadora entre las personas víctimas y aquellas que les han hecho daño?

¿Y si quien tuviese la desgracia de entrar en prisión fuese yo? Nadie está libre de caer en una situación así. Si yo experimentara la desgracia de padecer un paro de larga duración, una ruptura de mis relaciones primarias de pareja-familia, una pérdida de ingresos, una enfermedad mental… ¿Qué institución, (prisión u otras) me gustaría encontrar para poder rehacer mi vida, y no para hundirme
más?

– Si las personas reclusas van a volver a la sociedad, ¿cómo queremos que vuelvan? ¿Recuperadas o en la misma situación en la que entraron? ¿Tenemo claro que más personas en la cárcel no nos garantiza en el futuro una sociedad más segura, más cohesionada o más equitativa?

¿En qué medida son caras las medidas alternativas a las medidas de prisión en relación a las ya existentes?Aplicar en las macrocárceles a todas las personas reclusas el mismo estándar de seguridad (el más caro) sin necesidad de ello, es una inversión dispendiosa. Las medidas de cumplimiento alternativo son más baratas y mucho más eficaces y seguras a medio y largo plazo que el cumplimiento en un centro penitenciario.

¿Hay alternativas reales a la prisión? Hay muchas y todas aprobadasen nuestro ordenamiento. Por citar algunas:


1) los pisos tutelados para permisos en segundo y tercer grado;
2) los cumplimientos alternativos para toxicómanos;
3) los centros tutelados para mujeres (teniendo en cuenta también a las madres con hijos menores de 3 años);
4) los centros para personas presas con problemas de salud mental y enfermedades crónicas,
5) los trabajos en beneficio de la comunidad…

Además en muchas ocasiones las víctimas pueden ser mucho mejor reparadas a través de estos tipos de cumplimiento.

Posiblemente no es un tema que nos preocupe...el aislamiento de los que sufren la cárcel es suficiente para "anestesiarnos" sobre la importancia o la urgencia de este problema no resuelto...de nuevo la acción conjunta de las organizaciones del Tercer Sector preocupadas por la inclusión social prodrían mostrar su capacidad de riesgo para afrontar esta realidad desde un enfoque diferente y alternativo...


martes, 2 de noviembre de 2010

La participación en la empresa: el reto continua...

La cooperativización, el accionariado laboral, o el fomento de empresas configuradas para participar -cooperativas y sociedades laborales- son "espacios" para el empoderamiento social. El pasado jueves la Confederación Estatal de Sociedades Laborales me dió la oportunidad de elaborar algunas ideas sobre la empresa participativa en un Seminario Internacional -también intervinieron directivos de empresas italianas-y sobre la necesidad de profundizar en la participación también en empresas en las que ésta "se supone".

lunes, 1 de noviembre de 2010

Negocios inclusivos: vinos nuevos ¿odres viejos?


Cécile Renouard, Profesora en el Centre Sèvres de París e investigadora en ESSEC publicaba en el último número de la Revista de Fomento Social (nº 256) un artículo titulado La empresa: su función social y su rol en la sociedad. Fomentar y exigir. En el hay interesantes ideas y la problemática que suscitan los negocios inclusivos o en la base de la pirámide -que clasificamos con una innovación social de primer nivel. Uno de los casos expuestos es el de Danone (ya expusimos otros ejemplos en el post Gran empresa y erradicación de la pobreza. El consejo de administración del grupo votó hace unos años por una definición clara de la doble finalidad social y económica de sus actividades: contribuir a aportar la salud para laalimentación a una mayor cantidad de personas a lo largo de la vida. El grupo desde esta óptica lanzó en el 2005 un proyecto piloto en Bangladesh que dio como fruto el nacimiento de Grameen Danone Foods Ltd –perteneciente a los grupos Grameen y Danone a partes iguales– y a la constitución conjunta de un fondo de inversión Danone Communities, destinado a financiar los proyectos económicos con perspectiva social en los países en vías de desarrollo. La empresa Grameen Danone Foods fue fruto del acuerdo entre Franck Riboud y Mohammed Yunus que caracteriza los negocios inclusivos (“social business”) por promover el desarrollo de los pueblos pobres a través de una actividad económica rentable financiada por los inversores sin buscar ningún beneficio sobre la inversión de financiación, ni siquiera un beneficio mínimo. En Bangladesh, el proyecto de la empresa consistía en vender yogurt a bajo costo a las poblaciones urbanas y rurales. Cada yogur supone el 30% de los aportes alimenticios diarios recomendados en micro–nutrición (hierro, zinc, yodo, vitamina A). El objetivo era luchar contra la malnutrición de los niños pobres. Por otro lado, la empresa buscó contribuir al desarrollo y, en particular, generar empleos locales de distintas maneras: su propósito es la construcción de 50 pequeñas fábricas hasta el 2020, poco mecanizadas con la finalidad de crear el máximo de puestos de trabajo; la red de distribución local está asegurada alrededor de la primera fábrica construida, en Bogra, por una red de Grameen ladies, mujeres que encuentran así una fuente de ingresos teniendo al mismo tiempo una forma de independencia. El proyecto manifiestó con fuerza las tensiones ligadas a un modelo que busca articular el impacto social y la rentabilidad económica mínima: por ejemplo, el aumento del precio de la leche en un 70% en marzo del 2008 trajo consigo, primero, un aumento del precio del yogur y una caída de las ventas; luego, una transformación del producto con el fin de reducir de nuevo su precio de venta y hacerlo más accesible a los pobres; de otro lado, la escasa o nula rentabilidad del modelo hizo imposible, a corto plazo, la puesta en práctica de políticas sociales similares a las existentes con los trabajadores del resto del grupo, por lo menos en lo que concierne a los salarios y la protección social. Los dirigentes de Grameen Danone, muy conscientes de estas tensiones, enfatizaron su contribución al desarrollo humano a través de la formación profesional de la que se benefician los cincuenta asalariados de la fábrica. Además, este proyecto es representativo de las posibilidades y desafíos –culturales y de gobierno en particular– de la colaboración entre una estructura local (el grupo Grameen, especializado en el microcrédito pero que ha desarrollado otros negocios como el Grameen Phone) y una multinacional que posee competencias propias en materia técnica y comercial. Diferentes intervenciones públicas de los cuadros directivos del grupo Danone manifiestaron la voluntad de coherencia entre estas “buenas prácticas” y el funcionamiento global de la multinacional. Algunas decisiones han sido tomadas en este sentido: la elección de líneas de productos considerados como sanos; o la integración de la evaluación de la actividad social en la parte variable de la remuneración de “managers” desde el 1 de enero de 2008, etc. No obstante M. Yunus propugna el modelo de progreso de los negocios inclusivos aunque en paralelo con el desarrollo del enfoque clásico de las multinacionales. Según la visión, un tanto pesimista del premio Nobel, no podemos esperar de las empresas capitalistas, sometidas a la presión de los accionistas, contribuyan o se dediquen plenamente a los proyectos de desarrollo. Los negocios inclusivos deben encontrar sus propias reglas en el marco de un sistema “en el que lo primero sigue siendo lo primero”. Se puede objetar, en línea con el director general adjunto de Danone, Emmanuel Faber (intervención del 22 de octobre 2008), que está en juego un cambio de paradigma, una “revolución mental” para los directivos de las empresas. Los negocios inclusivos han de fomentarse sin duda, pero sin descuidar tanto el control riguroso de los objetivos y las acciones de los grupos multinacionales como la exigencia de una armonización de las leyes y normas a cumplir a escala internacional.
Foto:http://blog-ec.ubp.edu.ar/gestioncultural/?p=93