miércoles, 25 de mayo de 2011

Creación artística e innovación social

Creative Growth Art Center es un centro de creación artística creado en los setenta y situado en Oakland, (California). Está dirigido a personas con deficiencias neurológicas y sus diferentes responsables han conseguido aumentar la autoestima y la autosuficiencia de las personas que han pasado por él, gracias a su apuesta por el desarrollo creativo artístico del usuario. Sus fundadores, Elias Katz, un psicólogo con experiencia con discapacitados psiquícos, y Florence Ludins-Katz, una artista y profesora de arte, creían que los artistas con discapacidades podían producir trabajos que valiera la pena colgar en las paredes de galerías de arte y museos. Para Elias Katz (1977) propone –y lleva demostrando con artistas como la fallecida Judith Scott (sindrome de Down y sordomuda)- que todo el mundo, independientemente de lo severas que sean sus discapacidades, tiene un potencial creativo mediante un proceso que lleva aquilatando desde hace más de 30 años. Entendiendo mejor la naturaleza de la creatividad y del proceso por el que esta se desarrolla, se puede, de esta forma, abrir importantes vías para mejorar la calidad de vida de las personas con deficiencias neurológicas. Una vez los artistas han encontrado su campo creativo –lo que supone un itinerario de búsqueda creativa-, el centro les ayuda a desarrollarlo y a crear obras. La búsqueda creativa se realiza tomando contacto con las distintas herramientas artística que posee el centro: acuarela, ceras, lapiceros de colores, collages, trabajos con barro, trabajos con madera, manualidades varias,… Durante el recorrido por estas actividades en búsqueda de la que pueda resultar de mayor interés para el usuario, este cuenta con la guía de los diversos profesores de arte que va encontrando en las actividades. El nuevo artista tiene independencia y libertad suficientes para decidir cuál es el campo que le apetece desarrollar. Una vez quedan decididos la actividad que se desea realizar y la frecuencia de asistencia, se cierra el programa de cada usuario. Su revisión y seguimiento se realiza de manera periódica con el fin de mejorar su calidad de desarrollo creativo, invitando al artista a participar con otras herramientas, aunque es importante decir que raramente cambian su especialidad. Dichas obras son puestas a la venta a nivel tanto local, nacional, como internacional, en diversas galerías. La venta de las mismas provoca un beneficio económico al centro, que logra obtener ingresos de origen privado, y a los artistas que logran una mayor indepenencia económica y con ella, la mejora de su calidad de vida. En muchos casos, el ingreso económico se traduce en la oportunidad de pagar sus medicamentos, ir al médico o llevar a cabo un cuidado de su salud bucodental, en otras, el ingreso económico se invierte en simples caprichos o placeres personales. Como ya comentábamos el caso de Judith Scott –a quién descubrí en una reposición de la Noche Temática en La dos- resulta interesante. Su entrada en el centro fue a finales de los 80 procedente de una institución de Ohio en la que hubo indicios de que experimentaban medicación con ella. Judith, con una deficiencia de Síndrome de Down y sordomuda, nunca utilizo ningún lenguaje de signos para comunicarse con el exterior. Sin embargo, ella encontró un modo de expresarse a través de sus creaciones artísticas desarrolladas en el Creative Growth Art Center. Éstas le valieron un reconomiento internacional como artista. Judith consiguió encontrar en este centro, las herramientas necesarias para su expresión artística. Su caso está especialmente relatado en el libro Metamorphosis. The Fiber Art of Jufith Scott, de John M.MacGregor y en el documental de 2006, de Lola Barrera e Iñaki Peñafiel (producida por Julio Medem) ¿Qué tiene debajo del sombrero? donde el director del centro, Tom di Maria, explica que la venta de las obras de Judith está entre los 5.000 y los 15.000 dólares.

viernes, 20 de mayo de 2011

Eco-socio-innovación y Tecno-socio-innovación




En el post anterior hablábamos de los catalizadores y de su función promotora de innovacciones sociales y de innovadores/as. El Polo Europeo de Fundaciones de la Economía Social (PEFONDES) es una de esas instituciones catalizadoras de innovación social. Creado en 1999, reúne a las fundaciones preocupadas por promover un enfoque de transformación social dentro de la Unión Europea. Actualmente, desarrolla nuevas sinergias transnacionales para alentar la innovación social, la ciudadanía activa y el empresariado social de los jóvenes. En diez años, PEFONDES ha llevado a cabo numerosos proyectos apoyados por la Comisión Europea, tanto en el ámbito del diálogo intercultural como en el de la integración económica y social de los jóvenes. Una de sus iniciativas es el Premio para el Empleo Juvenil convocado como una respuesta ante el problema del paro juvenil.
El objetivo es reconocer iniciativas empresariales ejemplares ideadas por los propios jóvenes para la creación de empleo estable. El jurado, compuesto por diversas personalidades del sector de la Economía Social en el ámbito europeo, se reunió en Bruselas para designar a los premiados y nominados en las dos categorías, “Empresa” y “Proyecto de empresa”.


En su última convocatoria ha concedido a la cooperativa andaluza Mazetas el primer premio La cooperativa, cuyo fin es promover el hábitat sostenible, recibió 10.000 € como galardón. Fundada en julio de 2007 por tres jóvenes, Mazetas es una cooperativa afincada en Sevilla. Como indican en su web, una maceta es el contenedor de un pequeño ecosistema autosuficiente. Una pieza sencilla, reproducible , capaz de representar el fractal de un diseño integral. A partir de este concepto se fundamenta su actividad en la que una serie de profesionales –arquitectos- se han especializado en proyectos integrales con un enfoque ecológico sobre la gestión de los recursos y los residuos (Arquitectura Ecológica, el Diseño del Agua, el Paisajismo y la Gestión Integral del Hábitat) Mazetas utiliza una metodología propia: Hábitat Coaching o entrenamiento a la autogestión del hábitat, con ella se posibilita la transformación y gestión de los sistemas humanos, urbanos y naturales, enfrentando las responsabilidades globales con las necesidades locales y personales. A través de la ilusión, la confianza y el cuidado de las personas y los recursos, se busca la diversidad, el consumo consciente y el equilibrio de los ecosistemas naturales en los espacios construidos generando beneficios, empoderamiento de sus usuarios y reducción de su huella ecológica. Dado que hoy día la arquitectura sostenible y la ecología están en auge, Mazetas confia en su posibilidad de contribuir a crear empleos juveniles en corto periodo de tiempo. Se puede visualizar el video del programa La Mirilla de Canal Sur para conocer más esta realidad de economía social "eco-socio-innovadora".
También fue premiado -con 8.000 €- el proyecto de cooperativa belga PLOT.form. En este caso la idea original -"tecno-socio-innovadora"- desarrollada por tres jóvenes emprendedoras, es desarrollar un método innovador para recabar fondos para proyectos de desarrollo. La iniciativa consiste en un software en el que, a través de un juego de arquitectura y de diseño, el usuario mediante sus decisiones haga sus aportaciones económicas a proyectos en países en vías de desarrollo, que se materialicen en adquisiciones de materiales para la construcción. Este juego de captación de fondos se presentará como un paquete de programas para todo tipo de ONGs que quieran renovar su imagen y obtener recursos de manera novedosa, transparente e interactiva.




Los miembros del jurado, por otra parte, designaron otros cuatro candidatos por sus iniciativas innovadoras: E-graine (Francia), Kreatywni (Polonia), Handibot (Francia) y Iacta Advocats (España). Los premiados y los nominados, además de tener garantizada su promoción mediante un folleto, también tendrán la ocasión de inspirar a otros emprendedores asi como al público en general, participando en varios eventos, como la Semana Europea de la Juventud, la Semana europea de la PYME y el Encuentro Internacional de las Fundaciones para la Innovación Social, durante el cual se celebrará la ceremonia oficial de la entrega de los premios.